Anécdotas de diligencias

La fila que no avanza
Como si estuviéramos en una banda elástica de gimnasio, las personas ubicadas en la fila del banco esperaba pacientemente por la atención.

Un guardia de seguridad, cientos de personas impacientes. La Seria y Magnolia con el estómago vacío.

- Hay que ir temprano, porque hoy es lunes y peor; mañana feriado.

¿Increíble?. Dos cajas abiertas para atención de público general y trámites como dépositos, giros y cambio de cheques... alrededor de 6 cajas abiertas para deligencias... ¡Internacionales!.

Primer banco: BCI. Atención rápida, conversa amena y depósito ágil y bien agradecido.

Segundo banco: Santander Santiago. Miles de personas ya desmayándose (otras sin desayuno como la que habla), gente reclamando, gritando... insultando al pobre guardia que ya a esas alturas no sabía qué hacer.

- ¿Esto pasa en todos lados?. Acá todo el mundo es lento.

- Pobres cajeros. También son seres humanos.

Ovejas que danzan por autonomasia hacia la caja. El dinero se mueve rápido, pero nuestros pies estancados no piensan lo mismo.

After that: mañana serán nuevas y mejores letras.

Suerte perra

Noche de infortunios
Todo iba bien. Monedas en el bolsillo, una chaqueta y llaves para la vuelta.

En la caminata, aparece una bestia que en su correr fue detenido por la reja de su residencia. Ahí comenzaron los malos augurios.

Los ojos de vidrio soltaron sus alas para ir a dar a un lugar el cual les produjo heridas que, creo, no podrán ser reparadas. Primer ceño fruncido de la noche.

Las agujas del reloj avanzaban presurosas y los comensales aún esperaban a uno de sus invitados. Las llamadas por celular fueron miles y las respuestas nulas. Más ceños fruncidos y uno que otro improperio acompañaron al viento primaveral.

Por fin todos juntos y listos para partir.

- ¿Compremos algo primero?

- ¡¿Y mi billetera, dónde está?! (...)

Intercambio de monedas, préstamos irreales, más llamadas por celular. Brazos cruzados siguieron a los discursos.

Unos se fueron en auto hacia otros destinos; nosotros haciendo parar una micro.

- ¿Nos lleva a todos por "luca"?

Una botella de pisco hacía la "elegancia", ella y cuatro vasos plásticos. La bebida correspondiente y 2 botellas de cerveza para el popular.

Los pies avanzan por la tierra y la pregunta de rigor: ¿quién tiene los vasos?. Otro augurio de mala suerte. Los vasos ya no estaban.

Proseguimos con la caminata hasta llegar al lugar en donde la música, de la buena, se apoderaba de los sentidos de todos quienes decidieron tomar aquel lugar como "carrete".

El aposento estaba dispuesto para nosotros. La acera está lista para recibir a los comensales. La conversación fluye, pero eso no indica que no hayan más indicios de... ya saben: MALA SUERTE.

- ¿Y mi aro?. Se me perdió un aro. (...)

El ceño fruncido, los brazos cruzados, las malas caras y los improperios se alejaron para dar paso a las carcajadas. Todo es al final motivo de sonrisa, mientras no sea algo irrefrenable.

Fue una buena noche.

- A ver... tú, bájate te estoy diciendo.

- Pero tío

- Bájate wueón, te falta plata.

03:00 am. Micro de vuelta.

(a) cronológico

Así lo vi; así os lo cuento
Los parajes se vuelven húmedos y la vida es cada vez más afixiante entre el fuego de las antorchas y el heno.

El galope de los caballos vuelve loco a cualquiera. Nunca se sabe si es una visita de cortesía o la muerte quien nos viene a golpear la puerta. Después de todo, la cruz crecía a pasos agigantados entre la porquería del aliento terrotorial.

Los castillos están reservados sólo para algunos. El resto en las caballerizas esperando por las vestiduras que hoy desfilan en las grandes fiestas.

El bosque es un lugar conocido, la flauta es quien recrea parte del ambiente y las hogazas de pan el alimento de cada día.

Los monjes llegan en procesión con antorchas de fuego que mata en nombre de dios.

'It's a sin', decía la canción de Pet Shop Boys en un video al que la seria cuando pequeña, temía.

Un pecado. Todo o nada es un pecado.

Viene la Magnolia. Con las cintas que cuelgan de su pelo, hace una trenza que cuelga por sus hombros.

La vida se le convierte en cinco días. La semana se acorta para alcanzar la sonrisa.

Instantánea

En el lente irreal
Subiendo por la colina, los pies mojados, la ropa desgastada y miles de ojos concentrados en cada uno de sus movimientos.

- Acá es un buen lugar para sacar la foto.

Alrededor del verde - desértico, las rodillas se comunicaron con la tierra húmeda matinal que un buen hombre rinde homenaje cada día.

- Cada vez que te fotografíen, piensa en la siguiente frase:

"Soy joven, bonita y tengo un secreto".

El rostro enrojecido tiende a jugar malas pasadas y en ese momento... ahí está el "click" de la cámara.

Ella, tan tahitiana con una flor al costado de la oreja emulando a las más bellas musas de Gauguin

- Te pintaré según Gauguin. Ésa técnica le quedaría muy bien al cuadro.

Primero la fotografía, luego la pixelación computacional (y he aquí la gracia)... Me explicó Pepa que la piel humana tiene pigmentos azules y verdes en su mayoría, los que no son apreciables a simple vista. Sólo para veedores especializados. Pronto el óleo y la tela se suben al escenario de la artista.

Todo comenzó con las ganas de colgar un cuadro en tiempos futuros en que la recordada tierra nortina se hiciera sólo humo placentero a mis ojos. Las ganas de que esa pintura fuera de Pepa, sobrepasaba a la paleta del artista. Es algo más emocional.

Todo en un instante. El momento preciso en que el click lo creó todo. Después de todo "soy joven, bonita y tengo un secreto". Por lo menos en mis/sus sueños (i)reales.

Sensaciones

Nostalgia anticipada
Por hoy, la vista se dirige hacia la esquina de los recuerdos. Ya pasaron los cinco años de estar en las salas del conocimiento, o por lo menos de ése que intenta serlo.

La mente más que recordar de técnicas, frases y bibliografía, se va por los caminos más inciertos a los cuales nunca pensó viajar, después de todo, el periodista se "hace" en la calle ¿no?.

Cuánta anécdota puedes contar luego de haber transitado por la universidad de los amigos, carretes, salidas e incluso trabajos en terreno, de esos grupales en los cuales encuentras gente muy valiosa a la cual jamás pensaste en siquiera en ubicar.

Dejando de lado por hoy las desiluciones, malos ratos y cahuines baratos, los días universitarios llegaron a convertirse en un mundo placentero del cual a veces no quiero escapar.

A pesar de que las pisadas llegaron a doler durante esta última etapa, todos aquellos a quienes extrañaré llegan hoy a mi mente sin siquiera golpear la puerta. Después de todo son mis amigos, de esos que no piden nada a cambio. Ni siquiera que cambies tú mismo. Nunca lo había dicho, pero los quiero mucho.

After that: pronto más fotos (hay más amigos).

Noches de glamour

La noche de Alejandría

Antes que todo, la seria en conferencia de prensa declaró:

"Debo aclarar a todos mis lectores (soberbia)... que la juerga en miércoles,también en jueves y quizás en viernes y así, se debe únicamente a la celebración de la semana de la carrera de la Escuela de Periodismo.

Es por esta razón, que declaro ante todos ustedes que, en vista de ser ésta mi última semana de la carrera, pues egreso este año, debo asistir a estos eventos y simplemente PASARLO MACANUDO". Después de este balbuceo, proseguimos con las transmisiones diarias.

Estaba ella allí elegante, distinguida y con el desplante único que le dio el divino para subir al escenario y desde allí gritarle a todo el mundo su condición.

El largo vestido negro que llegaba hasta más allá de la rodilla, le daba el estilo que necesitaba además de dejar su cuerpo elegantemente estilizado, tal cual ella lo desea.

Zapatos de tacón ad hoc para la ocasión, el pelo tomado en una cola de caballo que le permitía posarlo hacia un lado del hombro tomando todo como un acto de coquetería.

- ¿Cómo están todos esta noche?

La gente ovacionaba, la querían, envidiaban, admiraban. Personalidad única envidiable por muchos. Así debería ser.

Alejandro hasta que subió a la micro, Alejandría después que la alfombra roja recibió su delicada presencia. El taconeo era presiso, el caminar totalmente firme, sin titubEar. Yo no podría hacerlo.

After that: Quizás nunca lea esto. Dedicado a Jano.

De juerga en juerga

En el torbellino del licor

Ayer se bamboleaba por la fila intentando mantenerse en pie aunque fuera por un instante.

Pasó carnet, credencial, y doscientos pesos, suma razonable para ganarse un pequeño timbre en la mano, el que le daba todo el derecho a entrar y salir del lugar.

La gente comenzó a empujarse intentando danzar al compás de las más tropicales tonadas mientras el humo de cigarrillo hacía el trabajo sucio junto al inseparable licor que embargaba hasta al más quieto de los postes.

Las mesas ocupadas y la del gorro de cuerina menea el trasero a vista y paciencia de los espectadores, quienes babosos fijan la mirada en ella.

- A ustedes les gustan esas minas poh

- No. A mí me gustan las tipas "raras"

Y así seguía el ritmo. Una máscara besaba a una muchacha, el hombre bailaba como mujer y la muchacha bebía sin parar; las risas se burlaban de los serios... el ambiente daba para todo. Daba para más.

After that: estuvo muy bueno.

Pantalla gigante

Al lado del camino, nos sentamos a esperar
Ayer y gracias a la invitación de Don Kral fuimos en busca de la gran sala de la pantalla gigante para apreciar una vez más algo del cine chileno.

La entrada decía "Se arrienda", sala cinco, 22:00 horas. Y ahí estabámos con algunas expectativas él, con ganas de escuchar la canción promocional yo.

Minutos de cinta y ahí aparece, sólo la música del single 'Encontrar' que da vida por lo menos al trailer de "Se arrienda". Filme que por cierto, es dirigido por el escritor Alberto Fuguet (...).

¿El autor?. Cristián Heyne músico chileno integrante de Shogún, y quien se inció en el mundo de la música en el grupo Los Christianes ¿Recuerdan?:

"He dejado rastros en el camino..."

"Posteriormente, formó el sello musical Luna, bajo el cual edita al mismo Shogún y a otros grupos como Topo, los desaparecidos LEM y Luna in Caelo..." (aquí)

Menos de bibliografía, más de apreciación decían por ahí. Al correr de la cinta, que no es nada más que una película chilena hecha por Alberto Fuguet (sólo eso), uno se va dando cuenta que es una peli - pop, algo que bien podría ser producido con una mayor ¿cómo decirlo?... hubiese sido mejor nomás. (palabra de la seria creyéndose intelectual).

Ahora bien, como simple espectadora de cine, aún sigo creyendo que el filme es una peli-pop, con diálogos demasiado largos a veces lo que cansa, pero con buena fotografía e intervalos entre lo que es lo real y la adaptación en blanco y negro que aparece en algunas secuencias.

Creo que sólo escucharía 'Encontrar' y vería la película dos veces más, quizás sólo una más para sólo... verla.

After that: Fuguet... escriba.

"Ay dime dónde estás
Dónde fuiste a parar
Hey cuéntame qué pasa
cuando miras hacia atrás
Te perdiste en un momento
Te escondiste en un lugar
Donde ya no hay recuerdos
No te puedes encontrar"

Letra por letra

Descifrando códigos

¿Importará que el reflejo del espejo sea el verdadero?. Al parecer últimamente a la señorita seria de más allá se le traba la pluma/tecla y el espactador se pregunta (por lo menos la mayoría de las veces)

- ¿Qué diablos es esto?

¿Preoupante?, ¿satisfactorio?, ¿importará?. En fin, los códigos están para descifrarlos y el autor para entregarlos. De pronto sólo el reflejo es el que importa; la forma se hizo para estirarla.

Ya de mañana, unos ancianos de 62 años de matrimonio ven levantarse el sol como todos los días.

Las cortinas se corren dejando ver las fotografías de antaño, las familiares, las de fiestas... de la vida. Paredes llenas de experiencia: verdes, amarillas y blancas. La casa está abierta.

Seguiendo a los códigos, la mano vuela al compás de la melodía del escritor. ¿Será verdad que cada cual hace su propia realidad?.

- ¿Qué es la realidad?

Hay muchas preguntas que desde mi cerebro nacen como las flores en primavera. Hoy, no hay respuestas. Aún.

After that: ¿Se habrá entendido esta vez?. El remolino me llevaaaaaaaaaaaaa.

Calle de tierra

Con lápiz y papel

La mano se mece e intenta por todos los medios de sostener el bolígrafo que se escapa como el pez de quien intenta agarrarlo a la fuerza en el agua.

Recorriendo las calles y la mitad del cuerpo entrenado, las voces se multiplican preguntando todo lo que está al alcance del papel.

- A, b ó c?

Eligiendo alternativas, discutiendo fórmulas, comentando accesos y ubicaciones, la mano continúa desafiando a la tinta y escribe y escribe sobre las palabras ya dichas. Todo según lo que dictan las plantillas definidas por el superior.

Pies arrastrando mugre por las calles de tierra, el papel ya sucio de tanto garabatear, el lápiz disgustado por no tener días de descanso y él ... intentando decir ¡vamos!.

- ¿Satisfecho, insatisfecho o muy insatisfecho?

Toc, toc, toc. Las puertas son el peor enemigo de los sordos. Todo aquel que está afuera ni se imagina que los de adentro ríen a sus espaldas.

- Pasa, pasa. Siéntense.

Las escaleras, asfalto y piedras hacen su trabajo mientras el ejercicio diario se inscribe dentro de lo que ya está manifiesto.
- ¿Un teléfono para validar esto?.

Paquidermiando

En torno a la mesa
Nunca es un mal momento para pedir una pizza. El estómago ruge al compás del trabajo en día sábado y la billetera, aunque se resiste en un principio a escupir un par de billetes (debido a que no corresponde hacer desarreglos), da la venia para poder realizar un almuerzo de camaradería.

Participaron hoy don Kral y John, uno editor y el otro diseñador de la revista Paquidermos a la que les he invitado a todos quieran participar.

Esta vez le tocó a doña pizza española. Mientras el señor repartidor venía en camino, la saliva se iba haciendo protagonista de la historia mendigando aunque fuera una pizca de adelanto ante tamaña sorpresa que se venía al almuerzo.

Al llegar, todo fue rápido. Las manos se dispusieron alrededor de la mesa y cada una se preocupó de asegurar un trocito del manjar que a esas horas ya se había convertido en todo un elemento de supervivencia.

Por supuesto la seria de más allá estaba presente retirarando las aceitunas moradas tan apetecidas por la gente del norte y tan aborrecidas por mi paladar que pide a gritos por esas pequeñeces... pero ¡negras!.

Luego de aquello, a seguir diagramando al elefante picarón.

Boleta guardada, suma a rendir.

Magiamagia

Sacar deseos a 100

La luz, esa misma que alumbra la vida saciando necesidades mínimas como la comodidad del sillón rojo, ahora resultó que también estaba dispuesta a conceder deseos humanos (y otros no tanto).

- Pasen... adelante, no tengan miedo. Tomen asiento.

Las damas aposentaban sus enormes traseros junto a la mesa, mientras los caballeros de terno y corbata esperaban tímidos tras la cortina para saber qué es lo que en segundos iba a suceder.

Sobre una mesa cubierta con un mantel rojo así como de terciopelo, estaba ella. La Luz.

En cuanto apareció, inmensa e inmaculda, el reflejo cegó casi por completo a los asistentes quienes ansiaban tener aunque sea por unos instantes a la diosa mágica junto a ellos.

- ¿Quién quiere ser el primero?

Silencio. Todos estaban mudos, inmóviles, congelados, anonadados, estupefactos y un montón de otras palabras domingueras.

- Emm, este yo... deseo un mejor trabajo.
- Yo más tiempo libre

- Y yo una cartera nueva (...)

La luz brillaba como si de ella dependiera la vida. Todos a su alrededor la llenaron de deseos. Algunos realizables y otros no tanto. Unos estúpidos y unos realmente interesantes.

- Es mi turno. Deseo...

Audífonos de cuero

Por la calle con Fiona
Pestañeando sin cesar, tropiezo con un disco amarillo que me da una salida fácil frente a todo y a nada a la vez.

La cinta de regalo rosa impide que vea de quién es el presente. No hay misiva ni recomendación: sólo me invitan a escuchar.

- Sé que te éste cedé te va a gustar.

Así, el viaje comienza con el último disco de Fiona Apple 'Extraordinary Machine'. El círculo amarillo comienza a girar al compás del track número uno (canción que le da el nombre al disco). Antes busqué en el paraíso de la música (véalo aquí) y tenía casi todas las estrellitas pintadas.

- Debe ser bueno.

Y así sigue el dos, tres, cuatro...doce. De pronto, da saltos que se acentúan con el viento que pega en mi cara en la transición hacia lo que se supone me haría más fuerte, resistible ante todo. Patrañas nuevamente.

Para darle una oportunidad al sonido, el bass toma protagonismo con una rayita, pues con dos "se satura el sonido".

Y así se mueve. El transporte diario no se fija en gastos y derrocha dinero y tiempo en los semáforos callejeros que nos sacan la lengua cada vez que vamos apurados por la vida.

After that: lo dices mejor tú

Listen her. It's good.

Vientos primaverales

12:38
No hay más qué decir: las turbulencias que afectaron el cerebro de algunos han hecho que los meteorólogos pronostiquen un alza en las temperaturas, las que seguramnte provocarán más de un desmán en el verde sector que antaño servía bien para largas tertulias inteligentes que murieron de a poco como la neurona en un pastizal quemándose de a poco.. de-a-po-co.

12:47: Ya con eso de la cárcel isla otra vez. Si no... no nomás.

Hoy la cabeza gira sin sentido. Las ideas están por allá o quizás por allí, queriendo tan solo dormir en los laureles. Por lo menos por esta mañana/tarde.

12:49: "...si sólo tuviera un lugar para expresar mi necesidad... Si sólo vieran de lo que soy capaz". "Seguro así sería feliz".

12:52: en fin, de lo que todos los días se puede expulsar, hoy no es un día de labia, mas todos los signos tocan a mi puerta. ¿Sólo? por hoy les digo: hoy no hay pan.

After that: ser hijo de padres separados, ¿se podrá comparar con las resoluciones geopóliticas de los estados? ¿ah?.

Camisa sucia

En la isla de la inteligibilidad

Existen ciertas dudas que rondan la habitación, sobre todo en días en que el mar refuerza su acento en la palabra. La muñeca pide auxilio, sus huesos no resisten el peso de la ortografía acentuada.

Dudas, preguntas, incertidumbre que recrea al poco nítico cuadro de las vivencias que se plasman con la pulma/tecla dando la impresión de que los signos bailan al compás de una singular y extravagante melodía no muy inteligible por las conciencias (in) humanas.

De pronto nos subimos a la isla del imaginario personal, el mismo en donde saltan los conejos a rayas y canguros celtas. Todo el cielo cubierto de malezas y el suelo acuático se ve de transparencia máxima.

- ¿Entenderán los dibujos que intentan mostrar?

Hay ocasiones en que la pintura se corre para dar matices extraños. Sin embargo, no son percibidos de la misma forma por el público. Eso reconforta, mas confunde al autor quien desea por todos los medios gritarles al oído la semiótica de la realidad (propia por cierto).

El mar se lleva las palabras para después devolverlas vomitándolas en el vacío de la incomprensión. Por otro lado, las líneas descritas son perfectamente inteligibles si se observan bajo la niebla.

After that: este fue un excelente fin de semana.

Celebration

Cuando uno no es VIP

Al parecer los globos, serpentinas, confetis y apagadas de velas tienen su minuto, lugar y ... personas especiales.

Aunque provengamos de un mismo lugar y tengamos las mismas costumbres, lenguajes e incluso lugares comunes, las situaciones nos llevan a catalogar al resto como más o menos importante en la lista de invitados personales a la hora de realizar una actividad, malón, ágape o como quiera llamársele a la celebración.

Horarios para unos y otros, asientos reservados: al lado del primo la amiga y al lado de la abuela la conocida; trozos de carne para allá, vienesas para acá. En fin.

El viaje se hizo eterno por los parajes del recuerdo, las anécdotas y el compromiso de ser mejor que hace un tiempo atrás.

- Sigues igual que siempre

- (Risas)

¿Eso es bueno o malo?. Porque claro, las existencias varían con el tiempo, ya sea creciendo o involucionando, ¿para qué estar con cosas?, si hay pies que retroceden y se vuelven mundanos como decía alguien por ahí (que no recuerdo, para variar).

Mi mente rememoró escenas de filmes o series teenager en su mayoría que muestran una fila o aglomeración de cierto grupo de gente en la que dos líderes escogen a quiénes desean que acompañen su equipo. ¿Quiénes siempre quedan últimos?.

Es preocupante, de hecho mi nariz no deja de olfatear a los VIP (palabra de moda y que ha tenido modificaciones como RIP, HIP, entre otras), ¿olerán ellos mejor?, ¿irán al baño a "hacer" pétalos de rosa como decía mi mamá?. It' a good question dear.

Al parecer la señorita seria de más allá (y ahora "la de lentes"), pertenece junto a otros, a los maniquiés que ya están dados de baja, los jubilados que ansían por una pensión digna. Desnudos en la bodega esperamos por algo mejor.

Servicio a la puerta

Sonrisas de gato
Desde las 9:30 de la mañana pudo darse cuenta que el sol los observaba con binoculares por entre medio de las ya tibias cortinas color oscuro.
El calor se coló en la habitación como un invitado sorpresa. ¿Deseado?, no lo sé. Pero los rayos tocaron su espalda como la punta de los dedos atrae hasta al más temeroso hacia la acción (no) compartida.
Cuando sintió sobre su cara el amarillo efervescente, dio media vuelta y prosiguió en su faena adormilada. Todo esto mientras al otro lado de la habitación, los disparatados dedos hacían magia en el teclado perverso, de ese que ¿quita? tiempo, pero que al mismo tiempo refresca la pluma sagrada.
10:00 a.m. Ya el sol preponderaba en la habitación y a pesar de que las cortinas hacían bien su trabajo, el calor ya no podía aguantarse más las ganas de hacer despertar las humanidades.
Intentó esbozar un sonido como de niño llorón, algo así como un "mmm", y ella corrió a socorrerlo sin saber que era una artimaña para hacerla aparecer en escena.
Lo demás sólo el sol, las cortinas y el binocular lo mantienen como información. Pero clasificada.

Pd: la foto corresponde a My Thougths, un blog al cual aterricé buscando una foto alusiva... o aluciva?... Bueno.

Añejerías

En la memoria perdida
La cinta corre 00:00:01. Comienzan a viajar las imágenes por las retinas olvidadas y el pasado se transforma en un presente casi obseno del que no muchos quisieran deleitar la mirada.
Coloridas puestas en escena desfilan segundo a segundo como queriendo llamar la atención del espectador traído directamente desde la nada.
Comentarios infantiles bailan alrededor de los asientos de plaza y el pelo revuelto impide la visión nítida del paisaje pronto a deslumbrales.
- Algún día recordaremos esto

Y es cierto. Para mala fortuna de algunos y melancolía para otros, la pintura allí dedicada no es más que recuerdos de días de sueños, anhelos y quizás hasta falsas esperanzas que todos en algún momento quisimos aprehender. No obstante, y luego de 1.825 días las cosas cambiaron y en algunos se volvió hasta imprescindible el hecho de competir colocando el pie encima y siendo lo suficientemente déspota como para decir:

- Hey, más respeto que trabajo en ...

- ¿Qué?

Pero bueno, así parecen ser las cosas por estos mundos paralelos. Los recuerdos se convierten en una sonrisa implacable luego de pertenecer a los grupos más disímles que todos podamos imaginar.

La fila es larga. Más vale salirse pronto de ella.

Junto a la almohada

Mejor seguir durmiendo
De pronto todo se nubló. Parecía que las cosa sólo existieran tras una cortina de espesa bruma, de niebla siniestra.

Pies, ojos, pestañas, manos, piernas y hasta la ropa están desgastadas. La vida de pronto se hunde en un pozo profundo pareciendo que ya todo da lo mismo. Indiferencia.

El rayo de luz, la ventana abrierta y todo aquello están sellado bajo siete llaves, algo así como envuelto en una gran cinta de embalaje esperando por alguien que los transporte hacia algún lado.

- ¿Por qué de pronto pareciera que todo sale mal?

La vida gira y se estanca en uno de los rincones. Caminando por el sendero que me lleva hacia un lado o hacia otro y no consigo encontrar lo que busco.

- Pareciera que siempre nos ven la cara

Es que para mí no es un juego. No es cosa de reir alrededor de un "trozo de papel". No es un trozo de papel.

El guitarreo incesante taladrea mi cabeza una vez más y el griterío que bien podría evitarse, llega a tocarme la puerta y ... ¡qué digo! si ni siquiera pide permiso para entrar. Es todo muy extraño hoy y pienso que las mismas hojas (des) ubicadas se unieron en un sindicato para destronarme y hacerme picadillos y tirarme "a ese mar que tranquilo te baña".

Sin zapatos

Ruidos silenciosos
Primer peldaño y los zapatos molestos con el ruido deciden guardar silencio hasta llegar al número cinco.

Se huele ya el plato del segundo piso. Algo así como lentejas, porotos o garbanzos se están sirviendo en la mesa y los comensales se disponen al "ataque".

- ¿No es acaso el día lunes el "día de la legumbre"?.

Tercer piso y la música retumba en los oídos. Las puertas y ventanas están cerradas, sin embargo la vida se cuela por los hoyitos del concreto y la melodía invita al lavado de platos.

Cuarto piso y ya van más de veinte peldaños. Los pies sacan la lengua y las piernas piden un poco de vida nómade.

La ventana que da a la cocina suelta algo parecido al humo del incienso.

- ¿Qué fragancia es la que eligieron esta vez?

Quinto piso y el silencio se apodera de las verdes paredes. La llave gira y logra abrir la puerta que también tiene algo qué decir.

Silencio... silencio. La radio, televisión y ducha están apagados. La respiración agitada es la única que habla al momento.

- ¿Almuerzo?

La hora ya se acerca y los ojos se cansan. La tarde está ideal para ir a la playa. Las cortinas se cierran y los ojos también, aunque sea por algunos minutos.

Días de la semana

Martes: no te cases ni te embarques**

Otra vez martes. La aspiradora hace su trabajo mientras que la señorita seria de más allá intenta adentrarse en el "fabuloso" mundo de la empresa periodística y de materias desconocidas que según alguna mujer con paperas ha dado por sabidas.

- ¿Qué entra para la prueba?

- ¿Acaso hay materia?

El ruido es ensordecedor, y por la radio Pudahuel cantaba "Luismi". Las noticias dicen que en cualquier instante, la noticia extra.

Tu-tu-tu-tu. La lavadora avisa de manera extraña que la ropa está lista para ser colgada.

- Así no suena cuando yo la echo a andar.

Sobre el escritorio, un plato con migas de galletas y un envase vacío de yoghurt de frutilla. Mi mamá me mataría si viera que no tomo desayuno como la gente.

Mi abuela me contó que el tener un cactus al lado del computador es muy bueno para que la pobre planta absorba "lo malo" de estos aparatos y no le cause daño al usuario/adicto/chateador. Tendré que ir a sacar uno de esos que hay en Arica, de aquellos a quienes se les llama "Cactus Candelabro", son gigantes. Quizás ellos sean capaces de absorber todo lo que ocupo este aparato.

Hoy, un blog (auto) referencial y a ratos por encima de las 200 millas. Siempre hay tiempo para ser uno ¿o no?.

Intento recorrer con la mirada el archivo power point que me indica el concepto de empresa, sistema... ¿Quiero yo esto?.

** Ya, de casarse un martes, igual fome porque no se podría celebrar toda la noche. ¿Pero de embarcarse un martes?. Eso no lo entiendo. (Duda metafísica/mula).

Confetis

Lluvia de dulces y colores

El sábado llegaron los príncipes a la tierra de los niños. Globos de colores y serpentinas culebreaban dichosas por esos pequeños pies y los sabores se subieron al segundo piso para desde allí lanzarse por los pasillos de risas, gritos e inocencia máxima y angelical.

A medida que corría la aguja del reloj, los juegos pasaron con la música hacie el chocolate caliente (tan agradecido por la de allá) y algunos exquisitos manjares.

- Esto está de chuparse los dedos.

Y cantamos:

Cumpleaños feliz, te deseamos a ti, feliz cumpleaños MARTIN, feliz cumpleaños a ti.

- ¡Bravo!, que apague la velita.

- Martin, ¿cuántos años cumples?

- ¡Dos!

Y así los confetis caían del cielo. El sábado fue un día mágico. El día de Martin.

Satélites y Estrellas**

La noche en que soñé
Es hora de dormir. La noche ya ha cubierto gran parte de la ciudad y las estrellas titilan fulminantes sobre nuestros rostros adormilados después de un día infantil, pero encantador.
Él se recuesta a su lado sin pensar en nada. Sus ojos se van cerrando y ella acompaña la somnolienta historia apoyando cada centímetro de su ser junto a la de su alma.
La televisión no tiene nada más que decir. En la radio la música que transita por las estaciones es amiga de los discotequeros y las revistas, libros y demases no tienen la suficiente fuerza como para hacernos abrir los ojos.
- ¿Tú crees que...?
- Sí. Duerme.
Soñé que me atrapaban. Iba escapando de dios sabe qué y de pronto el gobernador de la "Happy Land" me tiraba de las orejas como si de un castigo escolar se tratara.
- Sabes que esas no son las reglas de este pueblo. Es de muy mal gusto. ¡Qué pensarán nuestros vecinos!.
Yo no tenía nada qué decir. Si al final las reglas se habían dejado atrás, pero ¿alguna vez me las mencionaron?.
Mientras él apoyaba el brazo en su espalda, la adormilada situación fue traspasando la realidad. El sueño intenso se apoderó de las existencias. Los palpitantes corazones dieron paso a la profundidad del ocaso y las estrellas nuevamente titilaron alrededor de la función sin saber que trangredian las reglas.

- ¿Tú crees que...?

- Sí. Duerme. Duerme tranquilo.

Pd: "Satélites y Estrellas" es el nombre de un cortometraje realizado, entre otras personas, por una de las buenas amigas.