viernes, diciembre 08, 2006

En penumbras

A obscuras y con los ojos vendados, pero con un ojo destapado
Dirigiéndose por el centro de la calle de adoquines la vio pasar.
Alta y de abrigo largo, la rubia dejaba descansar el pelo ondulado sobre sus hombros, el que en ocasiones vibraba al compás del viento que se colaba por el lugar.
La siguió hasta la esquina, escondiéndose tras un farol que a esas horas apenas daba atisbos de estar vivo.
Ella, sin percatarse de su presencia, encendió un cigarrillo a la espera de un taxi, el que tras unos minutos apreció desde la avenida.
Al verla desaparecer, tomó el camino por donde venía. Los adoquines fueron su soporte aquella noche.
Foto: Viddefotos

8 comentarios:

Claudia Andrea dijo...

talves le dio miedo,,, encomtrar a quien estaba buscnado por tanto tiempo.
Como siempre nos pasa dejamos escapar ... tantas cosas...

Hay que atreverse,,,

Elías ... dijo...

á veces las oportunidades no se dan dos vces en la vida....hay q aprovecharlas...

Saludos!

Anónimo dijo...

hay que atreverse no más!

Saludos!!:D
JCMaqwtnt

Anónimo dijo...

y la dejó ir?....sí, hay que atreverse!

::: Isis ::: dijo...

Quizas a la otra se atreva.

Pero a mi en lo personal me dio una sensación extraña.

Salduos.-

Jenniffer Escobar Donoso dijo...

Que miedo, no me gusta la oscuridad, si fuera de día es más fácil atreverse.

Anónimo dijo...

TE informo que por asuntos personales cambié la direccion de mi blog.
Ahora es:
www.opinionfemenina.blogspot.com

Saludos!

Oscar Flores dijo...

Acá veo un cambio en la forma de relatar. No hay tanta pausa, son frases más detalladas y continuas... me grada más este estilo.