domingo, julio 16, 2006

Al límite

Sólo una mano
Es difícil entenderlo cuando no se han dado los pasos necesarios. Sin embargo, y al contrario de lo que se cree, es habitual que las pisadas se tornen complicadas cuando el suelo en el que mueres cada día se convierte en ondas. Sí, pequeñas ondas que - aunque crees fáciles de traspasar - son una pesadilla.
Pides una mano, pero no hay ni una sola en quien confiar. La mayoría están quebrajadas, flácidas y demasiado inútiles como para darles una oportunidad. Mala cosa.
Tu cuerpo se bambolea durante la mañana. Alargas tu brazo hasta más no poder en busca de ayuda, y no, lo que consideras como una salvación, no es nada más que una pesadilla.
Foto y ¿arreglo?: Viddeara

12 comentarios:

kiking_ dijo...

Y será realmente necesaria una mano? Y si quizás, sólo quizás, lo único que pueda ayudarnos es aquello a lo cual no hemos dado un nombre. Quizás una palabra dicha, vale más que más que la misma palabra escrita... entonces ¿para qué la mano?
Saludos (me fui en la volá parece)

Oscar Flores dijo...

Puchas... es como cuando Donnie Darko se encontraba esas murallas invisibles... y esos sonidos...

El mundo se transforma en una gran trampa.

Tabo Tabín Tabón dijo...

Sea cual sea el paso que vamos dando en la vida, muchas veces necesitamos de una mano para avanzar, el problema es cuando no la encontramos y realmente no está. Lo bueno es que nos fortalecemos hasta de una misma pesadilla.

!Muchos saludos desde Antofagasta¡

Jenniffer Escobar Donoso dijo...

Hola espero que te este llendo súper bien.
Con respecto a tu texto, es inevitable dar nuevos pasos, lo bueno es que siempre tras ellos va una ilusión, un deseo de estar mejor, un deseo de felicidad y mientras eso exista hay que dar los pasos, aun que exista un gran riesgo.
Quien no arriesga no gana.
Chao que estes bien, gracias por el mensaje.

Graciela dijo...

Yo antes me dedicaba a confiar en otros para dar un paso más, ahora esa lista de personas en quien confiar ha disminuído.
Una pena.

Saludos de esta bloggera desaparecida! un abrazo! Graciela!

@ldo dijo...

Me gusta creer que siempre hay una mano... y como dice el lugar común: "solo hay que buscar en el lugar correcto"

Yo le agregaría "y respirar profundo un buen rato antes"

Paz, claridad, y saludos.

Anónimo dijo...

Muy buena imagen!

poetarafa dijo...

Las manos que te pueden ayudar son muy pocas, ahora bien, lo que importa es que confíes en las propias.
Chao, besits.

Anónimo dijo...

Sera muy autosuficiente decir que uno no necesita mas manos, que con las mias basta? Aveces es mejor pensar asi.

Rodrigo dijo...

la típica de principito: lo esencial es invisible a los ojos.

o te estás aferrando en el lugar equivocado, o tienes que sacudirte, como perro mojado y buscar el sol para secarte.

un arcano: el ermitaño.
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AnaztrA dijo...

Pasé a saludar por el alto subterráneo. Ya era hora de su mínima visita y de una lectura diaria a su blog. Quizás Antofagasta me encanta, y reencanta, por eso vuelvo a todo esto con aires bien provincianos. Puedo auto nombrarme como la niña anticapital (se viene pronto en mi blog)
Bueno, me despido :)

·º·DarkAngel·º· dijo...

si, arreglo, yo sé como hacer eso jajaja, pero está buena...

hay veces en que uno no ve a nadie para apoyarse un rato y poder seguir su camino, y es verdad, no hay nadie... porque al final somos los únicos responsables de lo que nos pasa y eso es cansador...

también pasa que algunos aparecen en el momento menos esperado para refrescar nuestra cabeza y pensar mejor

ojalá te penen esos fantasmas por estos días, y te den un buen susto :P

chau